¿De qué puedo hablar hoy? En el mundo científico se han quedado perplejos ante recientes declaraciones, sin embargo podemos hablar de lo que a nadie le interesa, por ejemplo del silencio. Yo crearía una nueva bienaventuranza: Bienaventurados los callados y los que con prudencia respetan el sereno silencio de los demás, porque ellos serán respetados y apreciados por sus semejantes, Amén.
2 comentarios:
Hola Jackie, muchísimas gracias y bienvenida. Me animas a seguir, Un saludo!
María, te paraste... sigue escribiendo, mujer.
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